sábado, 16 de agosto de 2008

TORRIJOS 1831 RECREA EN EL MUNICIPIO MALAGUEÑO DE MONDA LA GUERRA DE LA INDEPENDENCIA

Para algunos historiadores el nombre de Monda deriva de la antigua batalla de Munda (año 48 a.d.C.), librada entre las legiones de Julio Cesar y los partidarios de Pompeyo en Hispania.

Pero existe otro referente de mayor calado que es el castillo de El Mundat, mandado a construir por Omar ben Hafsún, dentro de la estrategia de la red defensiva levantada por el caudillo rebelde en territorio actual de la provincia de Málaga, refractario al poder de Córdoba en el siglo IX.

Al amparo de El Mundat (arrasado por Al Mundir), creció el núcleo urbano de Monda sobre un terreno montañoso, a 370 metros sobre el nivel del mar.

Por su posición estratégica a 9 km. de Ojén, 10 de Coín y 44 de Málaga, Monda ofreció durante el periodo de la Guerra de la independencia en nuestra provincia, una vía segura de penetración desde el oeste para el ejército del general Ballesteros, en su estrategia de hostigar y derrotar a las tropas francesas que guarnecían Málaga, realizando continuas incursiones en la Serranía y áreas próximas, con sus tácticas de ataque y retirada, y el consiguiente desgaste de las columnas francesas del sacrificado IV Ejército.

En los últimos meses de 1811, entre los diversos frentes abiertos en nuestra provincia, el general barón de Maransín, gobernador de Málaga, intentaba detener la arribada al Valle del Guadalhorce de los 6.000 hombres del ejército de Ballesteros, por el eje Monda-Coín, convirtiéndose esta prioridad en una obsesión.

Desde Yunquera, el coronel español Peli se había mostrado muy activo, presionando con sus 500 hombres en el Valle del Guadalhorce, sector al que tuvo que acudir el comandante francés Thyrel con 250 hombres del 58º Regimiento y 100 jinetes.

Conociendo que “el boquete” utilizado por los españoles hacia el valle partía desde Monda, el comandante Thyrel dejó atrás Coín, llegando a Monda el 17 de diciembre, donde los vecinos hicieron una resistencia pasiva, privando de alimentos a la tropa francesa y de forraje a sus cabalgaduras.

La actitud de Monda y la de otros pueblos de las proximidades hicieron retroceder a Thyrel al ver el agotamiento de su tropa, tras un penoso recorrido de 100 km. por zona montañosa.

Monda también tuvo su protagonismo en la ofensiva del ejército de Ballesteros en febrero de 1812, convirtiéndose en cuartel general del propio Ballesteros el día 14, tras realizar el general un repliegue estratégico de sus fuerzas.

Francisco Ballesteros había nacido en Zaragoza en 1770.

Luchó contra los franceses 1793 en la guerra contra la Convención y, en 1808, con el levantamiento nacional contra Napoleón, la Junta de Asturias le proporcionó un regimiento que combatió integrado en los ejércitos de Blake y Castaños.

En 1811, ya con el grado de general y teniendo como base el campo de Gibraltar, Ballesteros tuvo como misión principal la liberación de la provincia de Málaga, objetivo que, tras diversas acciones a los largo de 1812, terminó cumpliendo el día 27 de agosto.

Con el patrocinio del Ayuntamiento de Monda en el día que la localidad recordaba sus historia y tradiciones, y dentro de las actividades que la Asociación Torrijos 1831 se propuso en la conmemoración del Bicentenario de la Guerra de la Independencia en la provincia de Málaga, el colectivo ha llevado a cabo en Monda, el pasado día 13 de agosto, una recreación histórica evocadora de aquellos difíciles tiempos, con un homenaje explícito al ejército del general Ballesteros que, durante un tiempo, asentó su cuartel general en esa población.

La recreación de Torrijos 1831 comenzó con la interpretación que Jesús Rivera realizó sobre el propio general Ballesteros.

Un grupo de paisanaje dio vida a los vecinos de Monda refractarios a los franceses del comandante Thyrel, interpretado por Chema Rodríguez.

La formación integrada por los Suizos de Teodoro Reding realizó una salva de honor al ejército de Ballesteros.

Manejada por sus sirvientes, la pieza de artillería de ocho libras efectuó varias descargas, mientras que dieciséis mujeres de la Asociación, vestidas a la usanza de la época, portaron durante el acto varias banderas entregadas al colectivos por diversas instituciones y entidades.

La recreación fue muy aplaudida y sentida por los vecinos, entregando el alcalde de la localidad un bonito presente recuerdo de Monda, tras su sincero agradecimiento institucional al colectivo.

Después el acto, el Ayuntamiento de Monda ofreció un ágape a los componentes de Torrijos 1831 que confraternizaron con autoridades y vecinos del pueblo.

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